Pronto comenzará el período de escolarización (os avisaremos por aquí).  Pero nos gustaría compartir por aquí una reflexión de Mari Carmen Díez Navarro (maestra y psicopedagoga) que describe lo mismo que sentimos en nuestro CPI SOLEDAD PUÉRTOLAS.

«Quiero hacer una escuela

que sea más que una escuela.

No me basta una escuela que enseñe los números, las letras y a sentarse derecho.

Ni siquiera una escuela que enseñe inglés, informática o educación emocional.

Quiero una escuela que sea encuentro.

Que sea palabra.

Que sea cambio. Que sea salud.

Que sea afecto. Que sea escucha. Que sea placer.

Que sea aprendizaje.

Que sea mirada. Que sea emoción. Que sea deseo.

Que sea ternura.

Quiero una escuela que resuene alegremente dentro de cada niño, de cada niña, de cada maestro de cada maestra, de cada familia.

Una escuela que nos ponga a latir el corazón.»

Ojalá nuestra escuela, ojalá vuestra escuela.