El curso pasado comenzamos a poner en marcha la sala de pintar, esta sala ofrece un juego entre pinceles, papel y pinturas. 

 La pintura se usa como vehículo para plasmar lo que cada uno siente, sin juicios, sin intención de crear una obra de arte, sin competir unos con otros. Solo la intención de expresar libremente. De este modo conseguimos:

• Mejorar la capacidad de iniciativa.
• Fomentar la creatividad.
• Generar estabilidad emocional.
• Desarrollar la personalidad del niño/a.
• Fomentar la relación con los demás.
• Adquirir seguridad en uno mismo.

Los peques acuden en pequeño grupo y disfrutan de una sesión adaptada a las necesidades de cada uno de los cursos, 3 años, 4 años y 5 años.

                                                   

 

El niño no dibuja para comunicar. No dibuja para mostrarnos algo. Dibuja para construir un mundo que es suyo, sólo suyo, libre de cualquier intrusión.

                                                                  Arno Stern